Culpas

LA AFECTACIÓN al erario público por los despidos realizados con lujo de terrorismo desde que arrancó este gobierno, ya está llevando a David a señalar de corruptos a los magistrados del Tribunal Laboral Burocrático. Lo de Monreal es culpar a otros del pasado y ahora del presente.

DEBIDO a su descuido al no presupuestar el pago de laudos, los titulares de las áreas de gobierno que echaron a la calle a cientos de trabajadores, podrían incurrir en responsabilidad administrativa por el impacto financiero y eso no lo dijo David al referirse al tema en estos días.

LOS DESPIDOS provocaron demandas y Monreal, con su fallido intento de ser irónico cuando no puede evadir las interrogantes de los medios de comunicación, los convocó a investigar a "los juzgadores" (así los llamó) que se comparten millones de pesos con los favorecidos por sus sentencias.

INJUSTIFICADOS sin embargo, fueron los actos de la Coordinación General Jurídica que es la que debiera investigarse. Vivimos en un ambiente donde todo trasciende y más cuando el gobierno es el gran empleador y alcanzó celebridad por la furia con que llegó a correr a quienes no le fueron incondicionales.

SE PRETENDE ahora instalar en la opinión pública la idea de que los laudos son producto de moches que exhiben a quienes tienen la alta responsabilidad de analizar y tomar decisiones que regularmente, aunque no le guste a David, resultan favorables a los trabajadores.

CUBRIR los errores internos con dichos que se arraigaron ya en México confrontándose desde el poder ejecutivo con cualquiera, no es otra cosa que la incapacidad más absoluta para asumir responsabilidades. Eso lo tenemos bastante claro.

CON la facilidad que tiene para señalar culpables del pasado y del presente, insisto, David va proyectando una imagen débil, volátil, coyuntural y carente del nivel a que lo obliga su investidura. Tenemos un gobernador de ataque y no de propuestas ni soluciones.

DECLARACIONES con ese contenido no le aportan nada a un estado en el que urge gobernar con proyecto y alto nivel. Si en efecto existen tan graves irregularidades como las que endosó a los magistrados, la investigación debe impulsarse desde el Ejecutivo y actuar en consecuencia.

AL ESTILO del presidente, pero con una copia peor que el original, Monreal trata todos los días de imitar a su ídolo sin percatarse de que en ese esfuerzo perdió una personalidad propia que era razonablemente aceptable en aquel David que conocimos antes de que se perdiera y extraviara el sentido de la realidad.

AMLO está haciendo una pésima escuela de personajes rijosos y prepotentes que no entienden la importancia del raciocinio, el diálogo y la convivencia que exigen los sistemas democráticos. Lo que hoy prevalece es el ataque y la polarización. Pobre país.

EN ZACATECAS la decepción ha sido mayúscula. Esperemos que la sucesora o sucesor de Andrés tenga un comportamiento a la altura del estadista que necesitamos. Siendo David tan proclive a la imitación nos queda la esperanza de que llegue alguien mejor para conocer la nueva versión de nuestro gobernador.