Dificultades

A RICARDO OLIVARES le ha correspondido un tiempo muy complejo donde emerge cíclicamente el problema del pago de salarios a los maestros zacatecanos. El inicio de este gobierno pasará a la historia por el conflicto severo ante el que David Monreal se vio rebasado y con un prematuro desgaste.

LE TOCA al Secretario de Finanzas gestionar ante la federación y esto ha permitido sortear las dificultades que se han agudizado desde que la Secretaría de Hacienda atraviesa problemas de flujos de dinero por distintos motivos y consecuentemente no ha venido al rescate en este tema sensible.

AFRONTAR el déficit ha sido un reto constante y no es nuevo, la diferencia, en todo caso, es que Olivares realmente ha cargado en solitario con las dificultades pues no vemos que en sus viajes y sus planteamientos ante la autoridad federal esté acompañado por David Monreal.

LA SITUACIÓN la ha resuelto el secretario que se ha distinguido por aciertos como el impuesto ecológico así como herramientas e instrumentos jurídicos que han impactado positivamente a las finanzas del estado con un buen manejo de la deuda que en este momento asciende a 6 mil novecientos millones de pesos.

DEL MAGISTERIO ya sabemos que ha logrado prestaciones muy justas que hoy día representan el gran obstáculo para la federalización de los pagos, pues se concedieron por decisión gubernamental como fue el caso de los aguinaldos en el sexenio de Ricardo Monreal.

Y ESTÁ SÓLO Ricardo Olivares para seguir resolviendo los pagos que, de no cubrirse, generan, como ya lo hemos visto, un enorme descontento en el sector magisterial que naturalmente no acepta el argumento simple y llano de que aquí no existe el recurso para atender la obligación salarial.

EN LA GESTIÓN del secretario se ubica la solución permanente del asunto. El gobernador le ha planteado en reiteradas ocasiones al presidente de la república la urgencia por federalizar la nómina, Andrés como siempre dice que habrá respaldo y por supuesto no cumple.

MIENTRAS no encuentre alguien la fórmula para compaginar las prestaciones con los salarios, lo único que le queda al estado es recurrir a la obtención del recurso con el conocido apartado 080 de la Secretaría de Hacienda que es de donde se obtiene el dinero para los maestros.

SOSTIENE Olivares una gestión permanente, insisto, y me parece que el magisterio debe reconocer el esfuerzo de este hombre que al mismo tiempo se ocupa de mantener aquí fianzas sanas y equilibrios que otorgan un sello distintivo al gobierno pero que se deben sin duda al secretario.

LAS FINANZAS en general otorgan un respiro ante situaciones complejas como los eventos delictivos que tanto han dañado nuestra imagen. Sin duda el secretario se estará abocando a resolver la siguiente quincena y no sé hasta donde será posible usar recursos propios en tanto Hacienda los cubre después.

Y DA LA CARA Ricardo Olivares por muy complejo que sea el asunto. Es un funcionario con la serenidad, la diplomacia y el aplomo para afrontar los problemas, algo que no existe en la cosa rara que se dio en llamar gobernanza, dentro de la cual, lo digo siempre, el secretario de finanzas es la excepción.