El Ritual

Incondicionales y aduladores de coyuntura se agolpaban para la selfie en el ingreso al baño de pueblo que comenzó con David.

El Ritual

NADA NUEVO si pensamos en la oportunidad perdida de mostrar algún rasgo de aquella política de que hacía gala Ricardo Monreal Ávila en sus informes gubernamentales. El primero de David simplemente confirmó el despreció por los adversarios y la proclividad a moverse en una zona segura y de confort.

EN EL INFORME la personalidad más destacada resultó ser el obispo Sigifredo Noriega, no hubo ningún ex gobernador y Ricardo Monreal se disculpó argumentando exceso de trabajo en el Senado; de los diputados federales sólo acudió el compadre cantante y de los locales un grupo de Morena.

LA AUSENCIA del doctor pudo ser, en efecto, por cuestiones laborales pero una frase del informante lo trajo al Palacio de las Convenciones: "el hijo de un campesino puede llegar a ser presidente de una gran nación"; entre las corcholatas sólo él cubre este perfil y resultó destapado en su tierra.

DE LA POLÍTICA que no se practica en la nueva gobernanza me quedo con el adjetivo que usó el diputado Enrique Laviada para ilustrar la actitud del gobernador David Monreal que se negó a escuchar posturas en el recinto legislativo: "es un déspota".

SE CONFIRMÓ tal perfil. El diccionario de la Real Academia Española establece que es déspota quien gobierna sin sujeción a ley alguna y abusa de su poder o autoridad. Por supuesto desde la tribuna volvió a denunciarse la forma en que Monreal comparte el poder con Verónica Díaz.

Y DAVID se refugió "en la gran familia bienestar" como la describió esta mujer que deberían evaluar ahora que viene el Presidente López Obrador porque no creo que su papel como delegada federal deba asumirse con un ejercicio de control absoluto, rencoroso y selectivo del quehacer público en el gobierno de Morena.

ESTUVO el gobernador Monreal Ávila al centro de un ejercicio individual. Si observamos las fotografías veremos que sólo lo acompañó el magistrado presidente del Supremo Tribunal de Justicia del Estado, Arturo Nhale García y nadie del Poder Legislativo.

FUERTEMENTE reconocida con un aplauso que me pareció sincero, la Presidenta Honorífica del SEDIF y esposa del mandatario, señora Sara Hernández, fue la más ovacionada seguida por la delegada Díaz que al ser mencionada por David arrancó voces de apoyo ¡Y cómo no si sus huestes llenaron el lugar!

ARROPADO por la burocracia y los servidores de la nación, Monreal Ávila pronunció un mensaje que no incluyó el análisis riguroso y autocrítico que tanto necesitamos en Zacatecas ni refirió acciones de impacto en el corto y mediano plazo. Su llamado a trabajar en unidad se estampa contra sus propios desplantes.

POR LOS testimoniales que se presentaron con personas sencillas en un trabajo bien hecho -supongo que por la Coordinación de Comunicación Social-, pude ver que la gente buena y noble del interior del estado se siente atendida por el gobernador. Qué bueno.

INCONDICIONALES y aduladores de coyuntura se agolpaban para la selfie en el ingreso al baño de pueblo que comenzó con David criticando anteriores "puestas en escena" con motivo de los informes, sin entender que también ésta lo fue y se llevó a cabo con apego escrupuloso al ritual acostumbrado.