En Crisis
Sin cobrar los docentes zacatecanos optaron por el paro indefinido y resulta totalmente incomprensible que desde el gobierno no estén tomando nota.
LA VIOLENCIA creció durante días que se suponían medianamente tranquilos y con algún turismo que dio paso a nuevas imágenes y notas de extrema crudeza ante las cuales David Monreal Ávila presentó un mensaje vía redes que no generó ninguna esperanza para esta pobre tierra nuestra donde la pesadilla no tiene fin.
SE RECRUDECIÓ el flagelo confirmando el reporte de inteligencia que trascendió en la revista "Proceso" anunciando que estaban por venir días más cruentos en un escenario de ingobernabilidad que se manifiesta también con la muy triste situación del magisterio que hoy recurre a la marcha de protesta.
LOS MAESTROS se han convertido en los mártires del tiempo de David que conceptualiza las prioridades de la entidad perdiendo de vista una esencial: la educación hoy paralizada debido a su negativa de cubrir salarios a quienes encarnan un derecho constitucional.
SIN COBRAR los docentes zacatecanos optaron por el paro indefinido y resulta totalmente incomprensible que desde el gobierno no estén tomando nota de los otros afectados, los alumnos que de por sí han soportado el efecto de la pandemia con las clases virtuales.
EL COVID por otra parte fue asunto de renovada preocupación social, al aumentar los decesos y mostrar un número de contagios que obliga a reacciones que no vemos y me refiero especialmente a las campañas de concientización que nadie se ocupa de fortalecer.
AVANZANDO con un panorama así seguimos viviendo en el desconcierto que no puede ser permanente ¿Dónde está la salida? Si en 1998 vivimos un episodio que cambió el panorama estatal y en el que el despertar social constituyó un gran motor. Ahora debe surgir esa reacción que sólo puede ser ciudadana.
Y TODO el descontento natural ante un gobierno para el cual van agotándose los adjetivos debe plantear el surgimiento de algo que no sabría cómo llamar pero que debe producirse y trascender más allá de las fronteras donde nos estamos ahogando para buscar al menos un poco de oxígeno.
EN GENERAL el sentimiento es el mismo, aún quienes forman parte de la inacabada estructura gubernamental viven en la confusión que trae consigo la falta del liderazgo de quien no tiene la menor cualidad para ser así llamado.
MUESTRA el clima que vivimos la necesidad de encauzar la reflexión a la búsqueda de alternativas. La crítica que ha sido constante en espacios de opinión, redes y memes tan populares hoy día, debe dar paso a otro nivel en el que seamos capaces de exigir una conducción estatal razonablemente lógica. Es nuestro derecho.
UN ZACATECAS con capacidad de reacción se hace ya necesario. Del señalamiento requerimos pasar a la acción que se convierta en una suerte de grito de auxilio. Puede sonar utópico pero hemos sido capaces de hazañas importantes ¿No podemos hacer nada ahora?
EN CRISIS por todos lados y sin ningún rumbo, sumidos en la violencia, la incapacidad gubernamental, la enfermedad, la nula expectativa y la indignación, debemos pensar con altura de miras y preguntarnos seriamente ¿Vamos a resistir durante más de cinco años? ¿Nos quedaremos de brazos cruzados?