Sin Retroceso
Antes marginados, insisto, ahora muchos zacatecanos y zacatecanas en esta situación encontraron eco a sus legítimas demandas.
EL PRECEDENTE de los tres años del Ayuntamiento que hasta hace poco encabezó Ulises Mejía y continuó Salvador Estrada respecto a la comunidad LGBT+, no puede detenerse ya porque se trata de una cuestión de estricto respeto a los derechos humanos.
DEL GOBIERNO que los más conservadores pudieran considerar polémico por las acciones en favor de este grupo social generalmente marginado, hoy retomo acciones que se impulsaron y se consolidaron lanzando un mensaje nacional inédito y absolutamente justo.
MORENISTA de origen y lopezobradorista de convicción, el gobierno que arrancó con Ulises y concluye con Salvador, sentó las bases de la izquierda progresista y promotora de los derechos humanos para todas las personas en conjunto con los colectivos de la diversidad sexual, activistas y sociedad civil.
EN ZACATECAS se pusieron en marcha programas y políticas públicas que sin duda alguna fortalecieron la cultura de la inclusión e igualdad, asumiendo plenamente que no puede haber ciudadanos de segunda y, lo más importante, preservando el respeto a sus derechos desde todos los ámbitos.
PLANTEA este esquema ya establecido, una decisión de vanguardia que incluyó el Plan Municipal de Desarrollo con eje transversal en derechos humanos y Perspectiva LGBT+ y destacadamente el matrimonio civil igualitario sin la necesidad de un amparo.
UNA cuestión que marcó este período de gobierno, fue la puesta en operación de la primera oficina de la diversidad sexual en el estado con reglamento dentro de la Ley Orgánica del Municipio y la conformación del Primer Comité Ciudadano de la Diversidad Sexual en la entidad.
AUTÉNTICA y firme fue la determinación de respaldar a quienes habían permanecido marginados de las políticas públicas y de ello da cuenta la Declaratoria de Municipio Libre de Discriminación por parte de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Zacatecas
INCLUSIÓN es un término que no necesariamente se expresaba con la integralidad que ocurrió en este período y que se hizo visible con las pinturas de la bandera LGBT+ en cruces peatonales y la realización de audiencias públicas para la población de esta comunidad.
PARA GRUPOS que anteriormente se encontraban en el más absoluto desamparo, se canalizaron apoyos a fin de tramitar el cambio de identidad de género, algo que nos guste o no ya es una realidad, merece respeto y una visión nueva con acciones afirmativas como estas.
ANTES MARGINADOS, insisto, ahora muchos zacatecanos y zacatecanas en esta situación encontraron eco a sus legítimas demandas. En este momento confían en que se mantenga la defensa, protección y garantía de sus derechos, bajo la consigna válida: "ni un paso atrás".
ASÍ SERÁ, estoy segura, el tiempo por venir no plantea para el municipio retroceso alguno.